América Latina

Expedición al fondo marino profundo: Entre la fascinación por la vida marina y la ciencia argentina en venta

14 agosto, 2025

Expedición al fondo marino profundo: Entre la fascinación por la vida marina y la ciencia argentina en venta

Con estrellas de mar, erizos marinos entre muchas otras asombrosas especies como protagonistas de la serie televisiva más vista en Argentina por estos días, la Campaña científica “Talud Continental IV” al cañón submarino Mar del Plata ha cobrado una relevancia mediática nunca vista. Canales de televisión, radios, diarios, cuentas de instagram y demás redes sociales están inundadas de notas y publicaciones sobre esta expedición al fondo marino profundo, que inició el 22 de julio y se llevó adelante hasta el 10 de agosto.


 

Durante ese período, 30 investigadores, en su mayoría del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y nucleados en el Grupo de Estudios del Mar Profundo de Argentina (GEMPA), recolectaron información sobre los ecosistemas marinos en un área muy sensible como el cañón submarino ubicado a unos 300 kilómetros de la costa de Mar del Plata, en profundidades de la plataforma continental antes no exploradas con este tipo de tecnología, que permite ver ejemplares vivos, in situ[1]. Según mencionan lxs científicos involucradxs, las primeras expediciones al cañón Mar del Plata fueron realizadas entre 2012 y 2013 a bordo del buque oceanográfico ARA Puerto Deseado, del CONICET, lideradas por el propio organismo científico nacional, pero sin contar con un robot submarino, el ROV SuBastian, capaz de tomar muestras, grabar imágenes en altísima calidad y transmitir en vivo.

El área de estudio se sitúa donde convergen la corriente cálida de Brasil y la corriente fría de Malvinas, un punto clave del Atlántico sudoccidental por su riqueza biológica, pero también por la existencia de “recursos estratégicos” muy codiciados por el extractivismo minero energético.

Mensaje de los científicos del CONICET.
Montaje realizado por funcionario del gobierno de Javier Milei y publicado en un post.

La Fundación norteamericana Instituto Oceanográfico Schmidt, a cargo de Eric (ex director de Google) y Wendy (trabajó en comunicaciones de Silicon Valley), es dueña del buque Falkor Too desde donde se coordinó la toma de imágenes y muestras, y quien financió toda la campaña (uso del barco, submarino, equipamiento, gastos de alimentación). Lxs científicos argentinxs involucradxs son trabajadores del CONICET, muchxs becarixs precarizados por el Estado nacional.

Es innegable que el streaming en vivo (transmitido desde el canal de YouTube de IOS) nos ha permitido apreciar y admirar las distintas especies marinas que habitan a miles de metros de profundidad en el mar, gracias a las imágenes captadas por el submarino SuBastian, generando un gran interés en miles de personas que cada día se conectaron a la transmisión, participaron en el chat con preguntas y comentarios, para “sentirse parte de la proeza científica”.

La repercusión ha sido tan fuerte que, en medio de la locura viral, se expresan posturas que parecen estar enfrentadas, pero, como siempre decimos, en el extractivismo no hay grietas. Por un lado, están los mensajes en defensa de una supuesta soberanía nacional impulsados por sectores vinculados al kirchnerismo, que hoy levantan la mano para denunciar lo peligroso que es hacer pública esta información sobre territorios tan valiosos para el extractivismo mundial, cuando desde ese mismo espacio han entregado los bienes comunes, sin dudarlo, al mejor postor (recordamos el acuerdo secreto entre YPF y Chevron para avanzar con la explotación de Vaca Muerta). A su vez, los libertarios (a través de sus streamings del odio) afirman que esto es parte de una “operación psicológica“ de los enemigos de Argentina, que va a afectar la posibilidad de desarrollar la explotación petrolera en el mar y que seamos potencia petrolera mundial. En definitiva, esos dos supuestos bandos están pensando en lo mismo…. seguir profundizando la entrega del mar a las corporaciones petroleras.

Sin dudas, esta experiencia nos ha acercado a un mundo completamente desconocido. En esos días hemos “descubierto” o comprobado que las profundidades de los océanos albergan un sin número de seres increíbles, y que la vida marina, aun en plena oscuridad, es maravillosa y mágica. Y, en medio del encanto generalizado, también nos surgen las voces de alarma. Porque toda esa biodiversidad está en grave peligro, pues, en esa misma zona, en ese mismo mar, en ese mismo fondo marino, empresas petroleras como Equinor, Shell e YPF (contando con la participación de investigaciones científicas provenientes de universidades nacionales y el CONICET) han realizado sus campañas de exploración sísmica y perforado el lecho en búsqueda de petróleo y gas. Y pretenden seguir haciéndolo, sin importar la destrucción que generen.

Si bien consideramos que es valioso conocer la biodiversidad de los ecosistemas que se están analizando, porque permite demostrar que ese ambiente no está deshabitado como afirman los promotores y defensores del proyecto petrolero offshore, sino que está lleno de vida, también decimos que una vida es sumamente valiosa per se, aunque nosotrxs no la conozcamos.

En este sentido, nos preocupa que esta campaña científica, financiada por una organización internacional vinculada al sector tecnológico, se da en este momento, cuando las corporaciones necesitan información clave y líneas de base ambiental para sus futuras exploraciones petroleras. O que la minería marina encuentre un sustento científico para ser realizada en esas áreas del mar que hoy estamos conociendo con tanto entusiasmo.

Una vez más advertimos que hay sectores de la ciencia que intervienen en favor del avance de los extractivismos, y denunciamos al Estado que sigue vaciando y desfinanciando la educación superior y las instituciones científicas para que se transformen en simples proveedoras de conocimientos y tecnologías al servicio del capitalismo voraz.

La ciencia no es neutra, y si no se posiciona clara y abiertamente contra las políticas extractivistas implementadas gobierno tras gobierno, termina siendo cómplice y responsable de la destrucción y el saqueo de los bienes comunes. Por eso convocamos a todxs lxs científicxs que construyen una ciencia digna e independiente a alzar la voz contra este sistema que nos convierte en meras mercancías.

¡Fuera el extractivismo de nuestrxs cuerpos y territorixs! ¡

¡Fuera las petroleras!! ¡Queremos un MAR LIBRE siempre!

Agosto 2025


Notas

[1] Ver: entrevista a Daniel Lauretta, jefe de la expedición. https://www.infobae.com/america/medio-ambiente/2025/07/28/canon-submarino-de-mar-del-plata-como-es-el-estudio-del-conicet-sobre-un-ecosistema-clave-que-esta-bajo-amenaza/