En Montevideo la actividad fue convocada por la Coordinación Contra Monsanto y el Agronegocio. Según los organizadores «tenemos instalado en el imaginario colectivo el paradigma de que la tierra pertenece a quien tenga dinero para pagarla. De a poco, lo mismo va ocurriendo con el agua limpia, ya que sólo pueden acceder a ella quienes tengan dinero para pagar agua mineral embotellada o un costoso filtro de carbón activado. No es distinto lo que están logrando con la semilla transgénica. Las patentes sobre las semillas son otra forma de tener propiedad sobre la vida. Si no tenemos tierra, ni agua limpia, ni aire puro, ni semillas, ya no tendremos libertad; perderemos definitivamente la autonomía alimentaria. No podremos elegir ni decidir sobre nuestra comida.» (ver texto completo de la convocatoria aquí)

 

Monsanto es una de las empresas con más poder en rubro de la soja en nuestro país. Es el principal proveedor de glisfosfato, un agrotóxico que mata todo ser vivo con excepción de la planta de soja cuyas semillas vende la empresa. Para volver a plantar en estos suelos se deben usar fertilizantes a base de nitrógeno y fósforo que, entre otras cosas, producen un crecimiento descontrolado de cianobacterias en nuestras principales fuentes de agua. Así, el modelo productivo promovido por empresas multinacionales como Monsanto elimina la biodiversidad del suelo y contamina los cursos de agua.

 

La actividad en el Parque Rodó comenzó a las 16 horas. Allí hubo intercambio de semillas, maquillaje artisticombativo y pintada de cartelería. Luego se realizó una marcha hasta el shopping de Punta Carretas donde se leyó una proclama (ver video más abajo).

 

En Maldonado, una protesta de similares características tuvó lugar el pasado 18 de mayo en la puerta del hotel Conrad, donde se desarrollaba el Congreso Mundial de Semillas (worldseedcongress2016.com), organizado por la Federacion Internacional de Semillas (ISF por sus siglas en inglés). Entre las particularidades del evento realizado en Punta del Este se destaca, por ejemplo, el código de etiqueta para la vestimenta de los participantes que exigía usar traje de negocios con corbata negra en la ceremonia del 18. Puede el lector imaginar la cantidad de campesinos y trabajadores asalariados del campo que concurrieron a este evento. Por supuesto no podía faltar el evento de golf, deporte estrella entre los trabajadores rurales.

 

Compartimos un video sobre estas dos actividades contra las multinacionales de la agroindustría.